All in en las parejas

Aquí vamos. Segundo  último turno de juego de las parejas. Rubén y JAve y Coco e Íñigo. No hace falta récord olímpicos. con incluso menos de 200 arriba puede ser suficiente para la final. Pero se va a sufrir. Las caras de desesperación son antológicas. La importancia de campeones, de leyendas del bowling mundial, apenas se puede transmitir con palabras. Se lo decía con sorna Tore Torgersen a Raúl: venir a sufrir aquí y perdernos Torrevieja...

Javi y Orche han empezado muy bien. 60a rriba tirando duro. Se han bajado bolas con el abralón al 500 buscando una reacción redonda y una línea más paralela, y ha funcionado. Rubén ha dejado un split en la décima y es una pena porque se podrían haber ido a 480 o 490 y eso es un inicio inmenso y un margen enorme por si toca algún par cabrón.

íñigo y Coco no tenían strike, pero llevaban 8 frames marcando todo. El zurdo ha terminado limpio con 203 pero un wash-out y un baby split en los dos últimos cuadros han supuesto un 165. Sabe a muy poco. En este patrón no hay segundos avisos: si la reacción es mala es obligatorio moverse, cambiar de bola, ajustarse. Si dudas, estás  muerto.

Da la sensación de que efectivamente se va a tirar más. Los norteamericanos abren con 500 y siguen siendo, para mí, los máximos favoritos. El Team USA algo ha espabilado, pero igual que los coreanos, y los suecos, están decepcionando bastante. Incapaces de rendir al nivel esperado y con fallos de ajuste, de spare y de repetición nada habituales.

Los asiáticos, en cambio, demuestran que su progresión de los últimos 10 años es imparable. Corea, Japón, Malasia, Indonesia, Filipinas... están por todas partes. En los open individuales todavía no tienen el nivel de europeos y norteamericanos. Pero en competiciones de equipo y en la preparación para los mundiales es obvio que lo hacen mucho mejor que los demás. Van en bloque, como equipo, con una actitud positiva espectacular. Pensando siempre en los seis, en el país, y no en sus egos

MEDIA SERIE COMPLETADA

Aquí hemos venido a sufrir. Rubén y Javi llevan 10 o 20 por encima del par tras una segunda partida catastrófica. Un par malo, de esos que te desesperan, los ha descolocado un poco.

Este patrón, desde mi punto de vista, es particularmente complicado para nosotros porque exige un tipo de ajuste al que no estamos acostumbrados. Pide abrir muchísimo la línea. Irse dentro, pero no tirar por dentro. No es la cinco o la cinco y medio. Es más la cuatro pero poniendo los pies pegados al retornabolas. Y acercando el breakpoint un poco. Visualmente no es complicado, pero físicamente es poco habitual y exige, además, velocidad y giro hacia adelante y no lateral. Una combinación extraña.

Si no,. se cuela, se cuela, abres y nunca llega.

Los chicos no están tirando mal, pero la zona es impredecible, cambiante, y nos falta mucho práctica en este tipo de situaciones y en un ambiente tan novedoso e incluso abrumador como un Mundial en una bolera de este tipo. Viendo sufrir en tu mismo par a quienes llevas años viendo por televisión.

El final de la serie ha sido emocionante. Las cuatro parejas qu ehan entrado han jugado el segundo bloque y básicamente se lo han jugado en la última partida. Los japoneses, gracias al 299 del que abría. Los norteamericanos gracias a seis últimos cuadros de película de ambos. Taiwan se ha quedado fuera poniendo 530 en la última.

Y los finlandeses gracias a un día mágico de Salonen, como en los viejos tiempos, y gracias a que el Oksanen ha puesto un 238 en la última y Petteri ha doblado, con pasado, en la décima.

Ha sido un día muy exigente físicamente. El jet lag todavía hace algunos estragos, hemos estado desde las 09.00 hasta las 20.00 por allí. Y jugar con puntuaciones tan bajas y ajustes tan duros agota mentalmente. Mañana toca desconectar. Juegan las chicas y las tripletas serán el miércoles por la mañana (hacia las 18.00 hora peninsular). Hasta entonces, tiempo para descansar, relajar, pasear un poco y pensar la estrategia par el resto de competición.