Cuartos de final en Barcelona

Hace unos minutos ha terminado en Bowling Pedralbes la primera serie de los cuartos de final del Internacional de Barcelona 2011.

Los clasificados entre los puestos 25 y 48 (es un decir, porque hay ganadores de series y las seis mujeres adicionales) han completado sus cuatro partidas, y en cuestión de media hora empezarán a tirar bolas de prueba los 24 mejores de la previa.

Este año, las series del torneo han estado llenas prácticamente en su totalidad, pero el ambiente de ayer sábado era algo más frío que en otras ediciones. Las pistas permitían jugar, como demuestran las puntuaciones de los líderes y que el corte se quedara en 1301.

Pero no permitían tampoco alardes. El momento más emocionante estuvo en el último frame de la última partida de la última serie de clasificación. Las puntuaciones eran extremadamente bajas para la tónica del torneo, y parecía que el mejor de la serie (que pasa directamente a la final) podía estar en 1260 o 1270.

Clara Guerrero, con 1273, esperaba intranquila fuera viendo que las posibilidades de entrar como última mujer se complicaban. Pero había esperanza: "sólo" necesitaba dos cosas. Que nadie pasara de 1300, lo que parecía muy probable, y que la serie la ganara alguien ya clasificado, como Krita Pollänen o Or Aviram.

Al terminar la quinta partida, Krista tenía +65, y sólo la superaba un Kim Bolley perfectamente centrado con 79 arriba. Necesitaba que el joven sueco pinchara y que la finlandesa apretara.

Y parecía difícil. Pollänen no lo tuvo en ningún momento y empezó a desinflarse, mientras que Bolleby sumaba dos dobles en 7 frames. Y sin embargo, llegó la fatalidad. Para todos ellos.

Bolley falló los dos últimos frames para terminar con 1268. Que hubiesen sido suficientes si otra zurda, y todavía más joven, no hubiese hecho el cierre de su vida.

Roosa Lunden (hija de la mítica Reija), una adolescente zurda que estaba jugando muy bien, no perdió los nervios. Tras un inicio terrible, llevaba una buena partida, pero tras comerse un palo 7 en el séptimo frame parecía que no tenía nada que hacer.

Sin embargo, puso el strike de la octava, el de la novena y los dos primeros de la décima. Bolleby ya había terminado con +68, y Roosa, si ponía el último pleno, le empataba. Y al tener una mejor última partida, se clasificaba.

Y así fue, para alegría de los fans finlandeses de la pequeña futura estrella.

Hoy, por cierto, ha vuelto a cerrar como una fiera. Empezó también floja pero gracias a un 256 en la última superó los 800. Y aunque terminó 9ª de la mañana y parece imposible que pase ronda está claro que ha cuajado un buen torneo.

Por el lado español, esta vez sólo hemos podido meter a dos jugadores en la final. Marcial Ovide, que con 1350 jugará en unos minutos, y Moisés Pérez, que se clasificó con 1323 pero esta mañana ha tenido la clásica serie en montaña rusa: 159, 258, 236, 169 para 822.

Estando octavo hay pocas probabilidades, pero al menos ha estado ahí.