Patrick Allen es un tipo con suerte. No lo vamos a negar. Es bueno, está muy en forma y está donde (en las finales) está por méritos propios. Pero tiene mucha suerte.
El otro día, Walter Ray WIlliams dejaba un sólido 8-10 en la bola clave, la segunda del décimo frame, y con ello Allen ganó el torneo. Un 9 spare hubiese bastado para, al menos, empatar.
Esta semana, ha sido peor. Llegaron a la final Rhino Page y Allen. Rhino venía encendido, después de derrotar ampliamente a Wes Malott en la partida anterior. Y lo demostró ampliamente. Spare, spare y 7 plenos seguidos.
Cerraba Allen, que iba por debajo, y puso un doble estupendo. 267 para él. Le llegaba el turno al joven Page. Necesita un strike y 9 spare para la victoria. Tiró la primera,e hizo pleno. Un semipleno le separaba de la gloria. 9 bolos, ganar. Menos, perder.
Pidió un re-rack (que volviesen a plantar los bolos), pero como ya había pedido los dos a los que tenía derecho en esa partida le dijeron que tararí. En vez de esperar igualmente, decididó tirar con la presión del reloj y la cuenta atrás amenazando: y no fue una buena elección...
Javi, a partir de ahora no vas a ser pastel. Vamos a llamarte Rhino!
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3 comentarios:
No andaría Chris Barnes por allí cerca mirando no?
Minuto 4,47.
La cara de Allen no tiene precio.
Eres bueno, Corky!!!
Madre miaaa, que suerte tiene ese hombre, rino no merecia eso, pero bueno encantado de cambiarme de pastel a rino jajaja, sera todo un honor xD.
J.M.
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